A medida que se va confeccionando una prenda comienzan a aparecer sus curvas y contornos, que también necesitan plancha pero que no siempre pueden ser planchadas en una tabla o en un manguero. El rodillo de planchar costuras, la almohadilla de sastre y el mitón de plancha son tres elementos capaces de resolver todos sus problemas y que, una vez se han usado, se convierten en indispensables. El rodillo de planchar costuras es un tubo de tela relleno de serrín bien apretado. Se emplea para impedir que se noten las marcas de las costuras en la prenda. La almohadilla de sastre tiene una forma oval, con lados curvos, va también rellena apretadamente de serrín. Es ideal para planchar la corona de la manga, el fondillo de los pantalones o las costuras princesa, zonas todas que necesitan que al planchar se mantenga al mismo tiempo la curva. El mitón de plancha es una especie de manopla firmemente rellena que se pone en la mano y se introduce en las zonas curvas más pequeñas durante el